LIBRO 1 – TEMA 4 -
Aptdº 2 -1ª GRAN
REVOLUCIÓN - COPERNICO
Contexto
del Tema ; Un poco de historia.
Hasta ahora, he dedicado el libro al proceso que pudo seguirse (o se siguió) para ir descubriendo nuestro Universo, mediante la aguda observación de mentes privilegiadas y con enorme entusiasmo por comprender qué, o mejor, cómo es y cómo se comporta “esta maravilla” donde vivimos y que nos circunda. Siempre misteriosa, sorprendente e inaprehensible. La labor fue y sigue siendo ardua, pues aun con los grandes avances actuales, nuestro Universo sigue tan misterioso como al principio de los tiempos y guarda enormes incógnitas, todavía por descubrir.
Ya hemos visto que filósofos y metafísicos con algo, o mucho de teología, iban descubriendo figuras abstractas (puramente mentales) así como las complejas y bellas relaciones que había entre ellas. Círculos, triángulos, polígonos, cubos, esferas, tetraedros etc.
Otros
se dedicaron a observar con gran paciencia y metodología lo que pasaba en el
mundo lejano de las estrellas. Midieron; Confeccionaron mapas del Cielo; Vieron
los movimientos de los astros y cualquier fenómeno que en ellos ocurriese. ¡! Difícil misión averiguar qué
pasaba en esos lugares tan lejanos!!
Resumen previo de los conocimientos (y/o creencias) que imperaron hasta El Renacimiento:
A) Grandes geómetras y matemáticos – Los resumimos en la familia de “Pitagóricos”. Abarcaron los Campos de La Teología, Filosofía, Metafísica y Política; por ejemplo “La República” de Platón.
B) Grandes observadores del cielo y todos sus astros. Estos aplicaban
para sus cálculos los métodos (y dogmas) descubiertos por los anteriores. Dominaban
La Trigonometría-La Geometría y El Álgebra, materias fundamentales para medir
distancias y movimientos. Se movían en el campo de la Teología, Las Matemáticas,
La Física cinemática (1*) y La Mecánica Aplicada
(Ingeniosos instrumentos de medición como Astrolabios, sextantes etc. con los
que medían ángulos).
(1*) Cinemática: Parte de La
Mecánica que estudia los movimientos de los objetos sin tener en cuenta las
causas de estos.
C) Opinión generalizada e indiscutible de que Dios, por ser perfecto, tuvo por fuerza que hacer un Universo a su imagen; Es decir: También perfecto. Desde Aristóteles, Platón, Santo Tomás de Aquino, hasta el siglo XVI, esta relación biunívoca era Dogma.
Todo
ello se desarrolló en una Europa Católica, dividida por los Cismas Luterano y
Calvinista, promovidos por el clérigo
alemán Martín Lutero y el sacerdote suizo Juan Calvino respectivamente. Ambos
fueron reformadores de la Fe Católica, desligándose de la Jerarquía Papal
Romana, como reacción a la corrupción a que ésta había llegado. Por ello a sus
iglesias y credos se les llamo Iglesias Reformadas; Reformistas; Protestantes; Evangelistas….
Mientras
Tycho Brahe (Tema 3 Aptdº 1 de este libro.), con sus tablas celestes Rodolfinas,
seguía con su concepción de un Universo Helio-Geo-Céntrico, otros aires y
conceptos revolucionarios se estaban fraguando.
Cabe destacar la figura de Nicolás Copérnico, que iniciaría La 1ª Gran Revolución del siglo XVI, llamada Revolución Coperniquiana ó Copernicana. Ya se había abandonado la idea de las Esferas Cristalinas girando alrededor de La Tierra, pero La Tierra seguía siendo el Centro Astronómico y Antropocéntrico, es decir: La Tierra y el Hombre centros del Universo.
Cabe destacar la figura de Nicolás Copérnico, que iniciaría La 1ª Gran Revolución del siglo XVI, llamada Revolución Coperniquiana ó Copernicana. Ya se había abandonado la idea de las Esferas Cristalinas girando alrededor de La Tierra, pero La Tierra seguía siendo el Centro Astronómico y Antropocéntrico, es decir: La Tierra y el Hombre centros del Universo.
Copernico.
Copérnico era un clérigo católico multifacético, ya que ejerció labores políticas, administrativas, militares, diplomáticas, entre otras. La Astronomía era para él mero entretenimiento. Era un aficionado que sin embargo ha pasado a la historia como uno de Los Grandes Astrónomos. Sabía que un tal Aristarco de Samos, gran Matemático del año 230 antes de Cristo, del que ya hemos tratado en anteriores capítulos, había promulgado una teoría que quedó olvidada en la posteridad. Conocía que la Tierra era una esfera y sabía su tamaño aproximado. Éste ya lo había calculado antes que él, Erastothenes de Alejandría (Tema 2 de este libro). Aristarco afirmaba que La Tierra y los Planetas, giraban alrededor del Sol. Solo La Luna lo hacía alrededor de La Tierra. Sus medios eran muy limitados, pero su inteligencia era larga. Para justificar su teoría, se basaba en la lógica de que, siendo el Sol mucho mayor que La Tierra y los Planetas, no era muy razonable que Este Astro Único, por ser donador de luz, calor y vida, tuviera un papel secundario en el gran concierto universal, girando alrededor de objetos mucho menos relevantes que Él. Por algo, en todas culturas conocidas era considerado como un Dios Mayor, por ejemplo: RA-AMON-HELIOS. El mismo Copérnico afirmaba, que El Sol era el reflejo de La Luz de Dios en La Creación, por tanto debería de ser también el centro del Universo.
Copérnico no tenía grandes medios de medida astronómicos(al contrario que Tycho), pero su enorme talento y conocimientos matemático-geométricos, unidos a sus observaciones, le llevaron a retomar la teoría de Aristarco, olvidada desde que El Cristianismo fue adoptado por Constantino como doctrina oficial del Imperio Romano ; 1º con el edicto de Milán, en el que legalizó el Cristianismo, prohibido hasta entonces( Año 313) y luego en el Concilio de Nicea (Año 325), provocando así la ruptura entre el Imperio Oriental (Bizancio) y el Occidental (Roma). Desde entonces la hegemonía de la Teología Cristina Antropocéntrica y heredera de Aristóteles, dominaría las ideas en Occidente hasta el siglo XVI y de las cuales también participaría Copérnico. Disponía de estos grandes conocimientos astronómicos de la antigüedad, entre otros; Aristarco de Samos; Erastoghenes; Ptolomeo. También conocía las excelentes y precisas cartas estelares Rudolfinas de Tycho Brahe.
Nuestro personaje averiguó varias cosas.
1ª) La teoría de Aristarco, que paso a llamarse “Heliocéntrica”, no solo era razonable, sino que simplificaba mucho la comprensión del Universo y hacía mucho más sencillas y comprensibles la Cartas Celestes, tremendamente complicadas hasta entonces.
-Helios = Sol –
Heliocentrismo: El Sol es el Centro del Universo.
2ª) Afirmó que las órbitas de los planetas, incluida La Tierra, eran perfectamente circulares. Su idea pues, de la correspondencia biunívoca entre un Dios perfecto con un Universo perfecto era compatible. La Circunferencia seguía siendo perfecta y por tanto el nuevo esquema también debía de serlo. Este hecho no le coincidía con sus observaciones, pero lo obvió, pensando (O pensando fingir) que se debía a sus errores de observación y no a la imperfección de la obra de Dios.
3ª)
Sus Cartas Celestes, encajaban mejor con este nuevo esquema y perfeccionaban las
anteriores.
Con
todo ello, se decidió a escribir su Gran Obra en 1543:
De
Revolutionibus Orbium Coelestium (algo así como “La Revolución de las Orbitas
Celestes”).
La
escribió como obra original suya, sin nombrar para nada al gran Aristarco de
Samos. A veces los grandes Sabios se comportan con ruindad, atribuyéndose como
suyas determinadas obras que son, o provienen de otros, como ya hemos visto con
Tycho Brahe y Wittich en el tema 3. Lo escribió sin idea de publicarlo, quizás por
cobardía, pues las divisiones religiosas y los prejuicios dogmáticos ya
comentados y todavía en vigor en las altas jerarquías eclesiásticas, lo hacían
muy peligroso. La Santa Inquisición, tanto la católica como la reformista,
acechaba.
Afortunadamente, en la Iglesia Católica también había altas jerarquías amantes
de la ciencia y sus descubrimientos, sin que ello implicase el pensar que se
atacaba a Los Fundamentos básicos de la Doctrina de La Iglesia. (Ahora los
llamaríamos curas progresistas). Uno de estos fue el Papa Pablo III, que
teniendo noticias del libro, le pidió una copia del manuscrito. A partir de
entonces se dio el visto bueno para publicarla, dedicándosela a este Papa amante de La Ciencia.
En esta obra demostraba con cálculos matemáticos, mucho más perfectos y desarrollados que los de Aristarco, que:
En esta obra demostraba con cálculos matemáticos, mucho más perfectos y desarrollados que los de Aristarco, que:
1º) La Mecánica Celeste aplicada hasta entonces se simplificaba enormemente.
2º) Estaba basada en cálculos rigurosamente matemáticos; Las observaciones y tablas de los astrónomos anteriores, sobre todo, la Cartas Rodolfinas de Ticho Brahe, ya no podían ser interpretadas de forma aleatoria.
3º)
Rompe definitivamente con la Sagrada e Inamovible concepción
Greco-Aristotélica-Cristiana del Cosmos. Ya nada sería igual en adelante. Los
esquemas rígidos clásicos, se irían derrumbando uno tras otro.
Grandes
Sabios de la época aceptaron y completaron con más datos este nuevo y
revolucionario esquema. Entre ellos podemos citar, por su importancia: Galileo
Galilei, Giorgiano Bruno, Johannes
Kepler….y otros. Aun así, no fue aceptada en el siglo XVI ni por la Sorbona
(Autoridad máxima en La Cultura de la Época) ni por los Reformados Luteranos y
Calvinistas. Fue tachada de herética y sus defensores salvaron sus vidas a
duras penas. Algunos, como Giordano Bruno, no tuvieron esa suerte y fueron quemados
en la hoguera. También Galileo estuvo cerca del martirio, de no haberse
retractado de sus ideas ante el Tribunal Eclesiástico.
Comienza la 1ª gran revolución científica
Principios fundamentales de La Teoría Coperniquiana:
1º) El Universo conocido y/o cognoscible era Eterno, Perfecto e Inmutable.
2º) Los Planetas giraban alrededor del Sol en orbitas “perfectamente circulares”. Lo mismo que La Luna alrededor de La Tierra.
3º) Todos ellos tenían a su vez un movimiento de rotación sobre su eje. Las trayectorias absolutas eran pues bucles cerrados helicoidales alrededor del Sol.
4º)
La velocidad de traslación de los planetas alrededor del Sol, era inversamente
proporcional a la distancia al Sol. Es decir: a mayor distancia, menor
velocidad y viceversa.
Teníamos de nuevo “El Universo perfecto”, ya que la circunferencia seguía siendo modelo de figura perfecta.
Nuevo squema del universo según Copérnico
Ver Figura 4-6 Planetas del Sistema solar.
En
ella podemos ver que aun no figuran Urano, Neptuno y Plutón, ya que no se
habían descubierto todavía. “Urano”, por tener una atmósfera azulada muy tenue, que lo hacía invisible con los medios
de entonces. “Neptuno” por su enorme lejanía. (Desde que se supone el origen de
la existencia de la civilización humana, aun no ha dado una vuelta completa al
sol). “Plutón” por su lejanía y pequeñez. Es tan pequeño, que recientemente los
astrónomos no lo consideran un planeta. Su satélite Caronte es más grande que
él, entonces podríamos suponer que Caronte es el planeta y Plutón su satélite.
En la edad contemporánea, se ha descubierto, con la sonda New Horizon, lanzada el
19 de enero de 2006, que en realidad es un sistema binario, es decir, que ambos
rotan sobre sí mismos. Está tan lejos, que la sonda ha necesitado 9 años para
llegar. En fig 4-6 vemos el nuevo modelo de Universo, restringido solamente al
sistema solar. No se conocía nada del más allá.
Fin tema 4-2
Entrada nº 22 del: ensayocosmologico.blogspot.com
bayodjose@gmail.com
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